El modo imperativo

29 de abril de 04


Felipe González se enteró de lo de los fondos reservados, gales y otras lindezas de su Gabinete mediante la prensa. José María Aznar leyó en los periódicos que no había armas de destrucción masiva en Irak. Ahora es el Rey quien ha acudido a los papeles para descubrir el equipo ministerial de Rodríguez Zapatero, quien no esperó los ceremoniales que contempla la Constitución para decidirlo y revelarlo.

A la Zarzuela llegan todos los periódicos habidos y por haber porque don Juan Carlos sabe que la prensa es un narrador omnisciente que sabe el presente y futuro del curso de la sociedad. Por eso los protagonistas se asoman al balcón de la letra impresa. Todos los días la Familia Real busca alguna noticia sobre la boda, para que no se le escape ningún detalle. Por su parte, la media sonrisa rubia de Sonsoles -como cantante que es-, preferiría la prensa como batuta de orquesta, batuta que la indique cómo y cuándo actuar sin desafinar. Si al modo de primera dama o de artista, ahora que es ella titular del Estado y no suplente del coro del Real.

El presidente electo es un rodríguez que no hará horas extra en casa, porque tiene un palacio que guarda Manolo, ese gato circular y circunspecto -como todo gato que se precie- que amonestaba a Aznar cuando la Botella se destapaba y superaba con delirios de la mayor grandeza.

El gobierno estrenado le viene al jefe del Ejecutivo como esos trajes descoyuntados y desgarbados que le hacen sólo hombros. No será personalista porque tiene complejo de cervatillo. Y las escaleras de los miércoles están custodiadas por un par de leones. No obstante, va para ciervo, según dicen las decisiones rápidas: fiscal general del Estado, ministro de economía, presidente de Efe, trato preferente hacia Llamazares, retirada de las tropas. Apunta maneras.

Hay que agradecer la poca palabra de José Luis, quien ha dado una patada en el culo a Miguel Sebastián, y, con él, al siete que le hizo el asesor bancario al programa económico de su partido -¡con el subidón, hasta pretendía convertirse en vicepresidente!- Tampoco ha situado a Bono en Interior para evitar descosidos autonómicos. A veces, cuando lo dicho atenta contra la coherencia, es mejor obrar en desacuerdo con la palabra dada. En lo que sí ha sido leal es el en gobierno “paritario”. Quiere esto decir que hay igual número de ministros que de ministras. Igualdad “porque sí”. Sin atender otros méritos que los numerarios, los porcentuales.

En EE UU -y en otros países con menos marginados-, la organización centenaria YMCA aplica la discriminación positiva en sus campamentos. Fletan autobuses del color del submarino para que niños sin posibilidades de ningún tipo pasen quince días de asueto y diversión, de lago y juegos, apartados de su nadería perpetua. Son todos negros. Y son minoría, en relación con los que pagan la más que cara matrícula: los recintos quedan atestados de monovolúmenes. Pero trato de favor, haylo.

En el Village neoyorkino, paraíso jipi de los setenta, se abrió este septiembre pasado un instituto para lesbianas, gays y transexuales. Los malos tratos y las vejaciones que aguantaban es lo que llevó a Bloomberg -alcalde de la citi- a tomar esa decisión. Podría parecer, incluso, que estaba favoreciendo la implantación de un gueto con esa forma de proceder, pero la medida se presentó con carácter progresista. Los mismos afectados la apoyaban.

También, un número de plazas universitarias se cierran al norteamericano medio. W Bush no quería que los negros estudiaran y llevó al Supremo las prácticas de la Universidad de Michigan, donde, en algunas carreras, el 13% de las plazas están reservadas a minorías raciales con notas bajas de corte. El Tribunal de aquel país respaldó la preferencia de las minorías raciales a la hora de entrar en el competitivo proceso de selección de alumnos. El Presidente del Imperio se llevó un revés. La Justicia vino a ratificar que el injusto sistema no viola la básica garantía constitucional de igualdad ante la ley.

Las conductas de riesgo deben resolverse con manga ancha. En Valladolid, en cualquier ciudad, se comprueba cómo el acceso a una vivienda resulta más fácil para aquellos que tienen flagrantes problemas de integración. Pero esas prebendas, lejos de ser un mal, constituyen uno de los pocos garantes para aliviar las desigualdades y favorecer una convivencia pacífica a medio y largo plazo. Si queremos fomentar una sociedad igualitaria, sin colectivos desfavorecidos, hay que apoyar medidas, en principio, injustas y disuasorias de las que perpetúan la inadaptación.

La discriminación positiva puede contener la desigualdad racial, religiosa, económica, etcétera. En este caso pretende enfrentarse a la segregación sexual de igual a igual. Trabaja sobre la realidad social. Pero aplicada a un partido político suena a tontería. Antes paritario era lo que se dividía en igual número de representantes de obreros y patronos, quién es quién en este rescate léxico se sobreentiende. Las mujeres cobran en la UE un 15% menos y en España, un 30%

El caso de la mujer en el Gobierno es distinto. La mujer por decreto no deja de parecer sexismo. La limita “por arriba” y no analiza el componente machista. El caso se justifica en una ley laboral que es papel mojado y que también permite las irregulares horas extra. ¿La paridad se la autoimpone el Ejecutivo a sí mismo para dar ejemplo o para tomarlo? Parece que es para dar. Para tomar ejemplo, el reparto del 50% debería haber sido equitativo. Y el peso de las carteras no es el mismo. Ahí es donde han hecho la diferencia. A fuerza de ser socialmente correctos -políticamente correctos es una mala traducción de la expresión inglesa- corremos el riesgo de ser socialmente estúpidos. Puede que haya quedado en socialismo de boquilla.

Enric Sopena publicó en su día un consistente artículo al respecto. En él decía que la paridad podía ser rival de “la discriminación del enchufe”, la cual “no provoca polémica”, y que responde a “una necesidad social innegable”. A los hombres se les pide demostrar su capacidad, a la mujer se la exige.

En España, El Tribunal Constitucional todavía estudia el concepto de paridad socialista. El Parlamento de Castilla-La Mancha sacó una ley que la exigía. El Gobierno anterior la recurrió y hasta ahora. Éste ha sido el único “ordeno y mando” del nuevo Gobierno. El modo imperativo permanente se cerró por derribo.