Brizna de impresencia

27 de febrero de 2015

“Morir cotidiano, undoso / Entre sábanas de espuma”. Cernuda. En la renuncia hay una vida que no pesa. “Hace falta saber / Por qué vivimos como moscas”, manejados por los remos del deseo. Lo chocante que es bajar una montaña y descubrir que, de repente, estar a sus pies significa otra cosa: ver que no llegaba a colina.

Brizna de peras

24 de febrero de 2015

“Esa expresión tan hortera [Marca España] me saca de quicio”. A. Muñoz Molina. Un país “incívico, ruidoso”, es un sitio plantado de olmos.

Brizna de idealismo

22 de febrero de 2015

“La Belleza es el brillar de la Idea a través de la materia”. Hegel. A veces ilumina, siempre hiere por su dimensión sicológica, tan poco humana, ciclópea, aun grano de arena, asemejada a los dominios de la Gran Penumbra: “Por grande que seas / No eres más grande que la Muerte”. Tagore. Levita para que sus pasos no nos despierten del sueño que llamamos vida.

Brizna de elongación

18 de febrero de 2015

“A veces hay que tener fe en la gente”. W. Allen, Manhattan. Aunque no haya compluvium en casa y las ciudades-Estado sean Mónaco y el Vaticano, seguimos habitando polis.

Brizna de ramas

14 de febrero de 2015

“Repito los nombres que ofrecen un nido”. José Hierro. Hay más islas, pero no tienen tesoro.

Brizna de pronaos

10 de febrero de 2015

“Nada se pierde: / el tiempo se aglutina en el alma”. Ana Blandiana. No hay sumideros. Todo es ciclo hidrológico. Metemos un pie en el mar sin pensar en ello, no muramos de consciencia, ahogados en la memoria.

Brizna de noche

7 de febrero de 2015

Las ventanas ayudan a encuadrar la vida. Deberíamos salir a la calle, por la mañana, con una en los ojos; dispuestos a elegir el mejor plano posible, incluso al cruzar una calle. La realidad es un montón de cristales rotos que tenemos que unir, pieza a pieza o eligiendo la mejor parte por el todo.
Desde la cafetería, el coche es un plano; el árbol, un plano; la luna, una luna. El plano, un almacén de pupilas; la vida, un plano inclinado. Desde dentro, la noche es la noche, un solar estanco al día; ella, él, la misma secuencia, el mismo adeéne.
Desde fuera, la noche permite el día, que no es la noche al revés sino un revés de la noche.
Desde fuera, el coche son sus asientos; el árbol, la clorofila; la luna, una estrella.
El exterior es una pantalla. El interior, un espejo.
Desde dentro, afuera estás tú; desde fuera, obligas a existir a los demás con tu mirada.

Noche serena, Hipónimo e Hiperónimo

Brizna de favila

3 de febrero de 2015

“Cuando se acaba el aire que acariciaba el labio”. Francisco Brines. Surge el viento negro frío del destierro. Todos somos, hemos sido, seremos, apátridas de un cuerpo glorioso, al menos, de alguno de letra. Y en la tarea capitular del alejamiento, el color mosca de la verja que dejamos atrás nos adquiere.¿Es que, acaso, estimáis que por creer / en la inmortalidad, / os tendrá que ser dada?”. La eternidad no forma parte del cuerpo, sólo de las cosas que este toca mientras dura.